lunes, 31 de diciembre de 2007

Tiros (I) - Barrido (Apostilla de Pepe)

Pepe ha escrito un comentario que es un artículo en sí mismo, así que lo reproduzco íntregro en el cuerpo del blog:

Aunque a todo el mundo lo que le gusta es tirar slaps, que es el tiro más vistoso y con el que mejor puedes quedar (incluso aunque te la paren, que es lo habitual), efectivamente el barrido es el tiro usado en el 70% de los goles. Es muy preciso, muy rápido y difícil adivinar su trayectoria porque todo depende del "toque final" de la muñeca.

Después de intentar aprender sólo, que me enseñaran y estar tirando durante varios años, si alguien me preguntara cómo aprender (y a veces aunque no me pregunten porque voy de listo), mi recomendaciones son:

Al principio es mejor no obsesionarse con el recorrido completo: yo solo o con entrenador, siempre he pasado por una fase inicial de intentar hacer todo el recorrido, desde muy atrás, porque (y es cierto) es lo que le dará fuerza al tiro, pero cuando todo nos salga bien. El problema es que llevaremos en puck demasiado rápido, haremos una trayectoria semicircular en lugar de recta y el puck se escapará por la tangente (Newton es aplicable en todo caso, por muy rápido que barramos), descontrolado y sin fuerza. Resultado: cunde la desesperanza y la idea de dedicarte a la petanca empieza a cobrar fuerza en tu mente.

En un estado inicial de "inopia" creo que lo mejor es centrarse en el momento en el que el puck pasa por delante nuestra. En el vídeo sobre el barrido de este blog hay un punto donde se aprecia la flexión del stick; ese es el momento más importante del tiro, en lo que a potencia se refiere. Estamos apretando el stick contra el suelo (tan fuerte que se dobla), tirando hacia arriba con la mano superior mientras la inferior aguanta el punto de apoyo de esa palanca y con el tronco girado encarando ya el objetivo.

Esta idea de palanca es la que creo yo que se debe tener en mente para empezar y practicar sólo desde este punto. Teniendo el puck a la altura de nuestro pie retrasado, como mucho, y desde ahí arrancar ya con la palanca "funcionando". La imagen de palanca también facilitará que el stick se mueva por una línea recta hacia el objetivo y no un semicírculo, que es lo habitual en los principiantes. Esa línea nos dará un control muy fino del tiro.

El punto donde acaba la palanca es cuando el puck pasa por delante nuestra y se libera la flexión del stick hacia el objetivo. Toda esa energía será la que se transmita al puck. En las primeras fases, si no tenemos todavía la fuerza suficiente o control de nuestra posición en el tiro para doblar mínimamente el stick, podemos incluso cargar el cuerpo sobre él de forma exagerada para ver como esa flexión da muchísima fuerza al tiro. Esto es una prueba curiosa de hacer y de sorprendente resultado para el principiante; perdemos el control de tiro pero nos familiarizamos con la palanca y vemos sus importantes efectos en la fuerza de salida del puck. Es gratificante.

Una vez que esta palanca nos salga bien debemos empezar a retrasar el puck cada vez más, siempre manteniendo esta trayectoria recta y la presión sobre el suelo, arropando el puck con la pala baja y manteniéndolo cerca del talón en esta parte inicial del movimiento y dejando que vaya rodando hacia la punta en el momento de la salida. Practicaremos esa transición entre el comienzo del barrido y la fase de palanca hasta conseguir que sea suave y alcanzar una potencia de salida aceptable.

Conseguida la potencia ahora viene el control. Hay que hacer coincidir la línea descrita por el puck en el suelo con la trayectoria deseada :-). Para terminar iremos puliendo los diferentes acompañamientos con la pala según el tipo de tiro (elevado o raso) que nos interese.

Después de 200.000 tiros podremos conseguir un barrido aceptable en cualquier caso, pero creo que con este método pasaremos por los 50.000 primeros un poco más animados.

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